El enano que no se estaba quieto [Nessa]

Aquello de dormir más que vivir no debía ser sano, y para muestra el hecho de que eran las cinco de la tarde, me había quedado dormido boca abajo en el sofá mientras veía de reojo un documental sobre hongos (No me extrañaba, aquel programa hubiera dormido al mismísimo Buda.) y el hecho de que estuviese mi hermano gritando casi a mi oreja me producía tal dolor en la cabeza que parecía que hubiesa salido la noche anterior de fiesta y tuviese una resaca de campeonato, y eso que hacía unas... diez reencarnaciones que no me iba de fiesta como era debido.

Me incorporé gruñiendo, con la misma mueca de dolor que si me hubiera pasado una apisonadora por encima, y cogí agarrando la cabeza del enano cuando pasó por quinta vez a mi lado, haciéndolo detener mientras con la otra mano me frotaba un ojo adormecido. Mi hermano, Lucas, me observó con un puchero, y yo entonces le solté apoyando mis codos en mis rodillas.

-¿Qué haces aquí, enano?-pregunté, extrañado. Tenía entendido que mi madre y Lindsay se habían ido de compras con él y no volverían hasta por la noche, por lo que me había tomado la libertad de ir sin camiseta y sin calcetines por la casa. Total, ¿quién me iba a ver, el perro? Que tampoco teníamos, por cierto.

-Mamá me ha dicho que vuelva porque no me estaba quieto en el centro comercial, así que he vuelto con la vecina.-dijo todo orgulloso como si hubiera conseguido una proeza. Di un salto en el sofá y abracé mi torso como si tuviese algo que tapar. Aquella vecina me daba mala espina, tenía setenta y siete años y me miraba con una cara lasciva que daba un miedo de la hostia. Mi hermano me leyó el pensamiento.-Tranquilo, no ha entrado en casa.

Suspiré y me revolví el pelo justo en el momento en el que llamaron a la puerta. Miré a Lucas y él me miró a mí. Nos quedamos un buen rato así, parados, hasta que se me ocurrió decir:

-Bueno, enano, ¿piensas abrir?

-¿Qué? ¡Abre tú, no te digo!

-¿Quieres una buena patada en la boca?

-... Ya voy, no te molestes.-contestó intimidado y salió a recibir a quien fuese mientras yo me volvía a tirar en el sofá boca arriba con una mano tras la nuca cambiando de canal. Con suerte eran las chicas de las galletas con sabor a cartón y tendría ya la merienda hecha.

Aquel día me había propuesto ir a ver al semidios Logan, gracias a su hermano, Lucas, me había enterado de que no saldría de L.A. hasta mínimo dentro de una semana y, a decir verdad, el encopntronazo del Starbucks me había sabido a bastante poco.
Con tiempo, pues no tenía a nadie que me esperase, me había debatido una hora entera sobre que ropa ponerme para no parecer una choni o todo lo contrario, que se me viese el plumero con Logan, al final cogí uno de mis típicos Outfits y que fuese lo que la opinión quisiera.

Hecho todo eso me monté en mi bebé querido antes de salir hacia casa de Logan, no quedaba excesivamente lejos, pero lo suficiente como para que al andar sobre mis tacones tuviese que quedarme sentada toda la visita en una palangana con hielo y... desde luego ese no era mi plan.
Puse "Poker Face" a todo volumen en mi Audi y bajé las ventanillas... si, me gustaba ser ruidosa pero... en L.A. quien no lo era?
Desde luego si me pusieran una de esas camaritas que aparecen en los programas donde pillan a gente cantando me llevaría la palma de la risa, iba cantando a todo volumen y bailando lady GaGa... sentada, no te digo más.

El viaje duró poco más de 45 min. a una velocidad normal... "Si, hice bien en montar en coche, sinó tendría que llamar a un taxi o pegarme la vuelta" pensé para mí misma poniéndome las Ray Ban. Ví el cartel de "Villa Lerman" y sonreí de lado, saqué las llaves del contacto y el ruidoso "Poker Face", el cual ya habría sonado unas 3 veces a lo largo del recorrido, dejó de pegarme en los oidos.

Me acerqué hasta su puerta, aprovechando que la entrada de coches estaba abierta... sabe dios por qué, esperaba que no hubiese ido justo el único día en el que Logan hubiese salido, enfín.
Aparqué mi coche y atravesé el jardín así evitando pasar por aquella puerta donde tenías que tocar el telefonillo y salir con un cabezón tremendo, porque arruinaría la sorpresa y tendría un nuevo mote del señor Percy Aguamentosa.
Toqué varias veces la puerta oyendo gritos dentro, fruncí el ceño mientras me quitaba las gafas y noté como una mirada se me clavaba en la nuca, volteé pero no había nadie.
Cuando me giré de nuevo ya estaba Lucas, el hermano pequeño de Logan, según él yo le gustaba, aunque creía que lo decía solo para fastidiarle -Hola Lucas, cuanto tiempo.-
El chico sonrió asintiendo varias veces sin decirme nada, me tomó por la muñeca y me hizo pasar al centro de la casa, miró y suspiró, para luego clavar sus grandes ojos en mí -Pensé que eras la vecina, que susto.- Fué lo único que dijo antes de salir corriendo escaleras arriba.
Sonreí y empecé a avanzar hacia el salón y... allí me desmayé, o al menos mentalmente, mi boca se quedó tan abierta que realmente parecía que lo estaba haciendo a posta, tuve que pellizcarme una pierna para dejar de observar aquel torso bien definido... y además... agh!
Me había pellizcado tan fuerte que estaba segura que me saldría una marca -Si... si molesto me voy.- Solo pude decir eso con una risita nerviosa.

Escuché el sonido de la puerta abrirse y después a mi hermano corriendo escaleras hacia arriba. No le di mucha importancia, seguramente se habrían confundido o vete tú a saber. Cambié de canal. Aburrido, aburrido, aburrido... Mira, mínimamente interesante, pero no me apetecía verlo. Desvié la mirada algo sobresaltado cuando escuché una voz familiar y parpadeé varias veces. Me incorporé en el sofá sonriendo, dejando los pies en el suelo.

-¡Anda, Nessa! ¿No te ha violado mi hermano por el camino? Qué raro.-dije levantándome y saludándola con dos besos. No me moleste en contestarle a lo de si molestaba. ¿Y esa pregunta? Claro que no, ella no molestaba, a no ser que se pusiese a ararñar losmuebles como los gatos, pero lo veía improbable... Al separarme me metí las manos en los bolsillos y me percaté de que no llevaba camiseta, bajando un poco la mirada. Me encogí de hombros para mí mismo. Bueno, tampoco vería nada nuevo.-¿Qué haces aquí? ¿Escuchaste mi llamada en el buzón de voz? Si ya sabía yo que no te resistirías a los favores sexuales...-bromeé riéndome entre dientes y escuché un sonido en las escaleras. Desvié la mirada y fruncí el ceño.-Tú, mocoso, desfilando a tu habitación.-dije totalmente seguro de que estaba por ahí cotilleando. A la próxima vez, lo dejaría sin posibilidad de legado...

Noté como si un pequeño mono me estuviese haciendo cosquillas a la altura de la boca del estómago -Por dios ponte algo encima...- Murmuré inaudiblemente para mí misma en cuanto ´vi que se levantaba para darme dos besos, no me gustaba estar con Logan precisamente por eso, era mi mejor amigo, y más pequeño que yo, y solo por un capricho que si, un capricho de varios años, pero un capricho seguramente, estropease el buen rollo que había.
Intenté tranquilizarme levantando la mirada casi hasta el techo con tal de no verle el torso mientras le devolvía los dos besos -Que manía tiburoncín, tu hermano no está salido y tampoco le gusto.- Reí divertida quedándome estática de pié, varias veces había visitado su casa, pero aun así me sentía como si fuera la primera vez, en la que te convertías en una lámpara de pié hasta que no te mandaban moverte, estática, y roja.
-Oh si claro, los favorcitos sexuales, esque Logan no me puedo resisitir a tus encantos.- "Bromeé" mientras me seguía riendo, dirigiendo mi mirada hacia las escaleras, pobre Lucas, por qué lo trataría así?

Desvié la mirada de las escaleras a Nessa y sonreí levemente, con los pulgares metidos en los bolsillos. Me rasqué el perolo e hice una mueca cuando dijo aquello.

-Yo no estaría tan seguro. ¿Cuántos años tiene, diez? A esa edad todos los muchachos están salidos.-dije y me di la vuelta dirección a mi cocina, haciéndole una señal a Vanessa para que me siguiese. No le dije nada de lo de los favores sexuales. Claro, como que le iba a decir que yo sí que... Shhh, calla, mente calenturrienta.-Ven. ¿Quieres tomar algo? Refresco, agua, cianuro... Lo que sea.-dije mientras entrábamos y al ver la comida me rugió el estómago. Hice una mueca.-Y si quieres algo para comer... ¿Tienes hambre?-pregunté sacándome un paquete de pam Bimbo y un montón de cosas más para hacerme un bocadillo de esos que hacían historia y salían en los museos enmarcados y todo.

Seguí con la mirada fija en las escaleras a pesar de que ya no había presencias "paranormales" en el lugar... todo con tal de no mirar ese torso y tener ganas de que me culpasen de pederastia o de ser una vieja asaltacunas como había a puñados por estas tierras...

Me desmpané cuando hizop un gesto para que lo siguiese, asentí encantada y comencé a andar detrás de él, haicnedo que mis pasos resonasen por toda la estancia hasta el comedor. Mis ojos se posaron en su espalda y fueron bajando hasta su trasero observando que el jodío, para ser tan joven, estaba en mucha mejor forma de lo que yo me esperaba, me mordí el labio dejando escapar un leve gemido por qué era masoquista?
Me puse roja al oir lo que había hecho y me limité a cruzar los dedos para que no se hubiese percatado -No gracias... o bueno mejor sí, ponme una coca-cola porfa, no sabes el calor que hace.- Por la minitele de su cocina estaban echando un programa de videos más vistos y tocaba la sección internet, justo en ese momento había salido uno que era mundial para mí, era un remix español que decían pocas palabras, pero que las dos idiotas bailando eran lo mejor, enseguida empecé a bailarlo como ellas solo repitiendo el "unx ah unx ah" que era lo único que no me salía con voz extraña... mi español no es que fuese muy fluido, y menos diciendo esas cosas que no sabía ni el significado...

Asentí con la cabeza sonriente y cogí una lata de Coca-Cola Light de las de mi hermana. Supuse que a ella le importaría las calorías y tal que se metiese para su cuerpo. A mí me la sudaba, pero claro, las chicas y su manía por el peso... Aunque bueno, a mí tampoco me gustaría que Vanessa perdiese ese cuerpazo que tenía... Ya estábamos otra vez. Hice una mueca mientras sacaba comida del frigorífico y me golpeé con una mano mi cabeza sin importarme si parecería un idiota o no, que seguramente lo parecería, y cerré la puertecilla del frigorígico, abriendo la bolsa del pan Bimbo. Levanté la mirada y me encontré a Vanessa bailando una especie de remix. Arqueé una ceja y sonreí de lado com cara de tonto como preguntando por telepatía "¿pero qué haces?" y entonces desvié la mirada a la televisión. Reparé en el video que me había pasado mi amigo, Dean Collins, y me reí entre dientes continuando mi labor de abrir la bolsa.

-¿Tú también has visto ese vídeo? Es un miticazo.-dije y, mientras miraba la bolsa, levanté los brazos e hice un movimiento como de DJ, bailando tan tranquilo, como si hiciese aquella parida todos los días.-Lore, Lore, Macu, Macu... ¡Subidóooon!-dije divertido, y es que de las veces que me había tragado ese vídeo me lo sabía de memoria, incluso podía imitar el acento español, aunque claro, que me saliese bien era otra cosa...-Tenemos que bailarlo en algún sitio público, ¿eh? A ver qué dicen después las revistas de nosotros. En serio, se van a quedar flipados.-dije sonriendo con los dientes mientras volvía a lo primordialmente importante; mi merienda. Saqué cuarto rebanadas de pan para hacer unas cuantas torres y, en medio, empecé a meter jamón de york, lechuga, salsa de yogur, queso, ketchup, mostaza, salchichas, ciruelas... Vamos, todo lo que pudiese, total, me metía esa clase de mierdas todos los días, si estaba delgado era por A) buena suerte B) gimnasio, claro y C) metabolismo privilegiado. Cogí como pude el bocadillo y me lo metí en la boca dándole un bocado mientras movía lentamente las caderas al ritmo de "Lore, Lore, Macu, Macu" que parecía que no dejaban de repetir por la tele. Mientras masticaba, me di cuenta d que Nessa estaba mirando y alcé las cejas, tendiéndole el bocadillo.-¿Quieres?-pregunté con la boca medio llena mientras el vídeo seguía en la tele.

Logan se volteó para coger la cocaola, light... bueno, tampoco me iba a morir, aunque yo seguía diciendo que una mierda le dejaban el sabor original, eso sabía a como cuando vas a un burguer y te queda el culo del vaso con un poco de cocacola y los hielos derretidos...
Me miró en plan what the hell y solo pude estallar en una tremenda carcajada cuando él, aparte de bailarlo, también lo "cantó" por llamar de alguna manera a lo que estaba diciendo, que realmente sonaba como los denominaban en España "guiris". -Oh si claro, lo haremos en la próxima premiere, pero arrastraremos y obligaremos a Ash a que lo haga con nosotros.- No me imaginaba los titulares del día siguiente "Oh dios mio, famosos drogados!" o cosas por el estilo.
Me senté en una de las sillas altas que tanto me gustaban de su concicna y abrí la lata bebiendo un largo trago y cambiando a la MTV donde estaban echando el videoclip de Ke$ha "Blah Blah Blah" me encantaba el estilo de música de esa chica.
Cuando se acabó la canción volví la vista hasta Logan y su... que demonios era eso? una expresión entre miedo, asco, curiosidad y diversión se formó en mi cara, me ofreció y empecé a reirme de nuevo -Estás loco? se puede saber que lleva ese bocadillo?.- Pregunté mientras saltaba de la silla y dejaba la cocacola en la mesa, para acercarme y darle un mordisco sin perder de vista la mirada de Logan, fruncí el ceño mientras intentaba adivinar todos los sabores de manera divertida, sin saber como me había atrevido a probar aquello.

Sonreí de lado cuando Nessa le dio un mordisco al bocadillo. Se manchó muy poco la comisura de los labios de salsa yogur, pero me bastó para que mi mente empezase de nuevo a pensar cosas insanas. Me volví a revolver el pelo, era una mania que tenía para cuando pensaba cosas como aquellas, como si alejase así los pensamientos impuros. Me reí entre dientes cuando preguntó por lo que llevaba y miré mi magnífica obra de arte, dándole un mordisco.

-Dirás mejor "qué no lleva".-bromeé con la mano levemente apoyada en la boca mientras hablaba para que no se escapase nada de la comida. Era increíble los malos momentos por los que había pasado por hablar con la boca abierta. Mientras tragaba hice un ruido con la garganta como si me acordase de algo y alcé las cejas intentando hablar mientras pasaba la comida por mi esófago y acercaba una mano dubitativa a la cara de Vanessa.-Tienes... un poco de salsa aquí.-dije torciendo la sonrisa algo avergonzado y quitándole la salsa con el pulgar de mi mano. Tras aquello, tragué del todo el bolo que se me había acumulado en la garganta y dudé cuando fui a devolver el brazo a su posición inicial. Finalmente, me llevé el pulgar a los labios y lo chupé sin mirar a Nessa. ¿Qué? No tenía servilletas... Además, no quería que se creyese que era un pervertido o cosa así, para eso ya estaba mi hermano. Sonreí apretando los labios y miré a Vanessa volviéndole a dar otro mordisco al bocadillo.-Eh, ¿sabes? He oído que Ashley iba a dar una fiesta en su casa, pero no digas nada porque no estoy muy seguro. Creo que me lo he soñado y todo.-dije para cambiar de tema y porque... Joder, odiaba aquellos silencios tan extraños.-Creo que iré preparando panchitos que llevarme, por si acaso.-bromeé ensanchando la sonrisa y terminando de comerme aquel bocadillo monstruoso. Y me había quedado con hambre y todo...

Escuché su respuesta y alcé ambas cejas a la vez -Oh dios mio genial... moriré envenenada.- Reí divertida, aunque eso me duró poco tiempo al ver lo que hizo... que en ese momento volvió aquel nudo estúpido e incómodo a mi estómago que no dejaba de apretarme cuando ya todo parecía ir bien.

La mano de Logan avanzó hacia mi cara y me pregunté a mi misma si estaba volviendo a soñar depsierta... si vale, lo había hecho y que? era normal... y si no lo era, a callar, para eso es mi mente.
Su dedo se posó en la comisura de mis labios y mi respiración cambió de forma notable, pero de forma inconsciente, una de mis manos se agarró a la mesa disimuladamente para no irme hacia atrás y meterme un tremendo pifostio en toda regla. Cuando me explicó el por qué lo estaba haciendo suspiré en parte aliviada porque no estaba soñando despierta, en parte... rara, simplemente sonreí amable, agradeciéndoselo como él lo haría... por que vamos, no lo hizo con mala intención, y menos con la que yo tenia en mente... Logan simplemente lo hacía sin pensar...
Se llevó el pulgar con mi salsa de yogur y lo metió entre sus labios, chupándolo, sentí como la primera vez que veía a un chico increible cerca mio... un cosquilleo se formó en mi pecho mientras un nudo un poco más abajo me cortó la respiración...
-Nessa... refréscate que te estás calentando mucho...- murmuré para mí misma dándome la vuelta, haciendo ocmo que no había visto eso y bebiéndome media lata de un trago sin descanso.

Cuando me hube tranquilizado un poco más volteé abanicándome con una mano -Oh... montó una fiesta? será zorr* insípida, y no me dice nada, que mala... pues me pienso presentar igual.- Respondí riendo mirándole a los ojos, agradeciendo que hubiese roto ese silencio

Terminé mi bocadillo y di unas palmadas en la mesa como si fuese una batería. Me senté en el borde de la mesa con mis manos en mis rodillas y giré mi tronco hacia Nessa para mirarla. Me reí entre dientes bajando la mirada y me humedecí los labios, mirando la televisión.

-En realidad, todavía no. En todo caso, si la hace, tranquila que nos vamos a presentar igualmente, aunque sea sin invitación y por la puerta de atrás.-la miré sonriendo de lado.-Y si no, nos montamos nuestra propia fiesta anti-Ashley y no la invitamos.-dije como si de verdad estuviera picado, haciendo un gesto con la mano. Sonreí de lado y, como casi siempre solía hacer, me quedé empanado mirando el techo. Me distraí en mis propios pensamientos. ¿Estaría hablando demasiado de Ashley? Vale, habíamos tenido algo, ¿y qué? Creía haberlo superado, ahora me gustaba otro. Sí, otra... Y estaba en aquella misma sala, conmigo. Empezaba a pensar que debería ir a mirármelo o algo, pues parecía que siempre sentía cierta atracción por las chicas que eran mayores, amigas mías e inalcanzables para mí. Con lo fácil que sería salir, yo qué sé, con Alexandra Daddario, la que hacía de Annabeth Chase en Percy Jackson y con la que había estado más de doce horas al día antiguamente, pero la verdad es que tampoco es que tuviésemos intereses comunes. Con Vanessa era... No sabría decirlo. Ella era elegante y yo descuidado. Ella era cariñosa y yo bastante pasota. Ella era alocada y divertida y yo me pasaba el día entero en mi casa, haciendo el gamba. Entonces ¿dónde coño se encontraban los intereses comunes? Bueno, quizá me gustaba simplemente porque era... Ella, Vanessa. Ya me podrían poner una Megan Fox punky delante de mis narices que Vanessa me seguiría gustando más que ella, y eso que me había jurado a mí mismo nunca sentirme atraído por ninguna chica Disney después de lo de Ashley...

Parpadeé, bajando del mundo de yupi a la Tierra, más concretamente a Los Ángeles. Miré a Vanessa con una ceja arqueada y volví a mirar hacia delante, cogiendo la bolsa del pam Bimbo y dándome con ella en la cabeza.

-La próxima vez que me quede en plan "Bloqueo Windows" avísame para despertarme del empane.-sugerí bromeando, con una sonrisa entre dientes que se evaporó lentamente mientras se me iba ocurriendo algo. Me relamí los labios, desviando de nuevo la mirada, y me puse nervioso mientras me frotaba la nuca, bajando la mirada.-Oye... Bueno, tampoco sé si querrías, pero... ¿Mañana tienes que hacer algo? Lo digo porque podríamos... No sé, ir a algún sitio.-miré a Vanessa intentando parecer tan despreocupado como siempre, pero se me notó algo tenso mientras recalcaba aquello último:-Tú y yo solos.

Me terminé la bebida y escuché el tamborileo de las manos de Logan que estaba... subido en la mesa? -Serás mono.- Reí divertida colocándome un mechón rebelde en su sitio, y sentándome de nuevo en la silla, me quedé un buen rato mirándo sus ojos azules que hasta en eso tenía una tonalidad rara... por qué me gustaba? ni idea... era enano, pasota y hablaba como uno de su edad... claramente, de porros, estar fumado, favores sexuales... era un inmaduro, y sin embargo me atraía "Soy estúpida" me recordé negando con la cabeza y viendo que el miraba hacia el techo y yo, de idiota, también miré por si había algo interesante, aunque luego caí que Logan de vez en cuando se quedaba en modo suspensión, por lo que miré un rato la tele hasta que volví a oir su voz.

Debido a que por culpa de mi capricho asaltacunas no es que pensase muy bien... o lo de Ashley lo dijoantes y me acababa de llegar la información, o por el contrario lo acababa de decir él -Claro que si! una fiesta anti-Ashley, arrasará.- Rodé los ojos de forma divertida, él hablaba mucho de Ash... bueno, dejar una relación no era fácil, y menos si la seguías teniendo como mejor amiga... es decir, no debía, y tampoco podía ponerme paranóica por que él hablase o dejase de hablar sobre Ash... al fin y al cabo e slo que hacen los mejores amigos, no...?
Solté un nuevo suspiro llevándome una mano de forma inconsciente hasta el colgante de platino que mem regaló mi madre, no podía seguir siendo así, una niña que lo pasaba mal y que solo estropeaba lo que había sin conformarse con lo que tenía, que clase de amiga haría eso?

-Prometido.- Le saqué la lengua en plan cariñoso cuando mi ordenador de windows personal me sacó de mi nuevo trance sufrido diciendome que lo despertara.
Por qué demonios tenía que ponérmelo tan dificil? vale que no es que me mereciese un premio por gustarme mi mejor amigo pero... jod*r, tanto como para tener que falsificar y doblar todas sus frases, tampoco era -Bueno... pues no, no tenía nada que hacer, por?.- Pregunté sin saber lo que venía a continuación, que fué escuchar lo que dijo y voltear la mirada hasta la salida, con ganas de salir corriendo hasta que le encontrase un sentido distinto al que le querñia dar antes de volver a mirarlo. Notaba como me ponía roja por momentos y al final me quedé sin decir nada

Empecé a enredar en los rotos de mis pantalones mientras esperaba una respuesta que nunca llegó. Apreté los labios y me quedé mirando la pantalla del televisor, inspirando fuertemente por la nariz. Ya está, debía suponerlo... Tendría que haberme estado calladito o haberme asfixiado con el bocadillo mientras le pedía aquello, así al menos no habría metido mi gran pataza hasta el fondo. ¿Habría alguna manera de volver atrás en el tiempo? Parpadeé y negué con la cabeza, revolviéndome fuertemente los pelos, pero ni así se iría el recuerdo del fracaso... Di un saltito hasta dejar mis pies descalzos en el suelo y me estiré, intentando hacer como que nada de aquello había ocurrido. Con un poco de suerte, Nessa haría como que no había escuchado nada... O bueno, a lo mejor era verdad que no lo había escuchado, pero no podía estar tan sorda... ¿No? Incluso el hecho de que hubiera podido llegar a serlo me consolaba...

Caminé hasta el frigorífico, de espaldas a ella, haciéndome el despreocupado.

-¿Quieres otra Coca-cola? Me muero de sed. Me bebería todo lo que hay en el desägue ahora mismo.-dije para aflojar la tensión del ambiente y me rasqué la pierna, buscando alguna bebida con la que poder refrescar mi ahora seca garganta por los nervios. Si es que era gilipollas... Mira que cagarla en aquel momento... Me estremecí, no sabría muy bien determinar si por el fracaso o por el frío que le daba a mi torco el frigorífico, pero tenía ganas de meter la cabeza en la nevera y no salir de ella hasta encontrar una cura para el payasismo. Sí, seguramente sería como me vería Vanessa en aquellos momentos... Como un payaso mocoso de dieciocho años recién cumplidos que intentaba ligar con una de veintiuno. Mandaba huevos, sí señor...